Un interesante artículo aparecido en Marca y firmado por José Ignacio Benito trata de indagar en los motivos de la superioridad del hemisferio Sur en los tests de primavera y otoño.
Estoy de acuerdo en lo básico, pero no en algunos detalles. Por ejemplo: es cierto que los del Norte llegan con más partidos (y más desgaste) a los tests de junio y que eso mismo le sucede a los del Sur en noviembre. Pero habría que pensar que no se trata en ambos casos del mismo tipo de desgaste: mientras que en junio los del Sur llegan más descansados, pero también con más rodaje del que pueden permitirse los del Norte en noviembre. En junio, los del Sur llevan 5 meses de competición encima, lo que es un rodaje más que suficiente (el Super 14 ya está ventilado), mientras que en noviembre los del Norte sólo llevan 2 meses de competiciones (sin que ninguna haya sido acabada). Tienen ventaja de campo y los del Sur vienen más cansados, esas dos ventajas son indiscutibles, pero la falta de rodaje propia también hay que tenerla en cuenta a la hora de valorar los resultados.
En resumen: de una o de otra manera, las selecciones del Hemisferio Sur tienen cierta o mucha ventaja tanto en los tests de primavera y de otoño. Eso sí, hay que reconocer también, que el nivel de sus equipos es, a día de hoy, superior al de los del Norte.
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